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PERDER EL MIEDO AL HAMBRE

"LA HUMANIDAD TIENE QUE COMPRENDER QUE LA MUERTE FÍSICA ES MEJOR QUE LA ESCLAVITUD"

“EL AYUNO EN EL YOGA Y POR QUE ESTAR DELGADO Y FUERTE “

El practicar la disciplina no consiste solamente en resistirse al cuerpo astral. El cuerpo astral forma parte del “cuadrado negativo” (físico-etérico-astral-mental inferior) por lo tanto hay que empezar por el origen de la negatividad: por lo físico. Primero hay que desidentificarse del cuerpo físico (comprender que no somos cuerpos físicos) y luego se pasará a la desidentificación del cuerpo astral y la mental inferior. La disciplina empieza por disciplinar el cuerpo físico y luego de ahí se pasa al cuerpo astral (mental inferior). Da la impresión que en Occidente lo de “disciplinar el cuerpo físico” ya no es cuestión de elección personal sino más bien de una “obligación social”. En Occidente ya no se perdona el estar gordo y no estar en forma. ¿De dónde viene esa tendencia?


A mediados del siglo XX aparecieron los diseñadores de moda gays quienes establecieron un nuevo modelo de mujer ideal a nivel físico: la nueva mujer ideal tenía que estar extremadamente delgada y no tener pecho ni caderas. Para mantener esa delgadez, la mujer tiene que pasar hambre, y por otro lado, si quiere ser “elegante”, no puede destacar pechos ni caderas, ya que eso sería “vulgar”. Lo que se le estaba proponiendo a la mujer era un aspecto asexual lo cual las mujeres aceptaron de buena gana ya que pensaron: “Por fin están dejando de tratarnos como si fuéramos objetos sexuales”. Este nuevo canon de belleza viene junto con la liberación de la mujer y la inventaron los hombres con un principio femenino muy desarrollado: los gays.


Por otro lado, casi al mismo tiempo aparece por primera vez en la historia un canon de belleza masculino. La humanidad estaba expandiendo sus miras, estábamos empezando a ver más allá de nuestras narices físicas, y por primera vez se ha tratado al cuerpo físico masculino como lo que es: algo femenino. Recordemos: todos los cuerpos físicos son femeninos. Ya sabemos que lo femenino atrae y lo masculino es atraído. Lo femenino necesita ser/estar guap@ para poder atraer. Lo curioso es que mientras a la mujer se le estaba imponiendo un cuerpo delgado y débil, casi a punto de morirse de hambre, al hombre se le estaba imponiendo un cuerpo “rocoso”: duro y fuerte como las rocas, lleno de músculos tan duros, tan fríos, tan insensibles y tan incomodos como las rocas. Una mujer extremadamente delgada (débil) y un hombre extremadamente fuerte (“rocoso”). ¿Qué es lo que estaba ocurriendo en el subconsciente de la humanidad para que el resultado fuera este ideal de belleza? En ese momento los cuerpos astrales del “primer mundo”, que es donde surgieron estos cánones, estaban más débiles que nunca y lo astral es femenino, y el cuerpo mental estaba más fuerte que nunca y el cuerpo mental es masculino. Ese canon de belleza fue la manifestación física del estado de los cuerpos astrales y mentales a nivel colectivo en el primer mundo.


En el siglo XXI esos imperativos de belleza se homogenizaron. Ahora, a los hombres, aparte de ser fuertes, también se les exige que estén delgados, se les prohíbe estar gordos, y a las mujeres a parte de estar delgadas, también se les exige que vayan a los gimnasios y se pongan fuertes. Todo el mundo tiene que estar fuerte y delgado. Este canon de belleza todavía no se ha intelectualizado, todavía está a nivel astral, a nivel de sentimiento, a nivel de intuición. Las personas todavía no entienden el verdadero motivo por el que tienen que estar “delgados y fuertes”. Al no entender esto todavía, la gente interpreta este sentimiento de la única manera que puede: de manera física, y dice: “No es solamente cuestión de belleza. El estar delgados y tener los cuerpos fuertes es bueno para la salud”. La gente sabe de manera intuitiva que eso de estar delgados y fuertes tiene algo que ver con su bienestar, pero todavía no entienden esto bien. El no entender este sentimiento da lugar a muchas malinterpretaciones. Una de las malinterpretaciones más comunes es la de: “Hay que “comer sano” para estar delgados y fuertes y tener buena salud”. Así que la gente malgasta su precioso tiempo y energía preocupándose de “comer sano” cuando hay dos cuestiones importantes:


1. El “comer sano” no existe. La “comida sana” todavía no existe. Toda la comida es negativa.


2. No se trata de “comer sano”, se trata de NO COMER, se trata de PASAR HAMBRE PARA PERDER EL MIEDO AL HAMBRE.


A nivel físico la energía sexual es la energía que lo mueve todo. La necesidad de aparearnos a nivel físico es la fuerza que más nos mueve. El miedo a no encontrar “mi media naranja” o “mi otra mitad física”, ya sea para una “relación seria” o para “un encuentro sexual ocasional”, es tremendo en la humanidad. Por eso el no ser sexualmente atractiv@ es uno de los miedos más profundos, pero también uno de los miedos MÁS OCULTADOS Y MENOS RECONOCIDOS que existen en la humanidad. El miedo a la fealdad física es casi un tema tabú. Por eso son muchísimas las personas obsesionadas con su aspecto físico, pero son poquísimas las que están dispuestas a reconocer que se preocupan de manera obsesiva por su aspecto físico porque tienen miedo a no ser capaces de atraer a parejas sexuales, a amantes. Normalmente se suelen engañar a sí mismos y a los demás diciendo: “Yo me preocupo de mi cuerpo por salud, para estar san@. Me da igual lo que los demás piensen de mi aspecto”. Esa preocupación obsesiva por el aspecto físico viene del hecho que los cuerpos físicos son, como hablamos antes “mitades”.


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Los cuerpos físicos no son unidades enteras, sino que necesitan de su otra mitad para completarse.

Como la consciencia humana en su gran mayoría todavía está atrapada en el nivel físico, el miedo a no llegar a completarse, el miedo a quedar separados, divididos, incompletos, SOLOS para siempre, es el que hace que la gente se preocupe y se obsesione por el aspecto físico. El miedo a la fealdad física va unido al miedo a la soledad que a su vez va unido a la necesidad de encontrar “la otra mitad física”. La obsesión por el aspecto físico en realidad es el miedo a no encontrar pareja sexual. Por eso mucha gente cuando se casa, deja de preocuparse por su aspecto: ya han encontrado lo que buscaban.


Las personas que aun teniendo pareja se preocupan obsesivamente por su aspecto físico, son aquellas que tienen traumas de la infancia (negatividades) muy fuertes y el miedo a “no ser amados”, o sea a no tener sexo (el sexo es el amor horizontal) es muy grande en ellos. Así que aun teniendo pareja, se preocupan de no dejar de atraer a otras parejas sexuales potenciales por si acaso. Atma, la voluntad Divina, sabiendo como funcionamos a nivel físico y que la fuerza que nos mueve es la sexual, que la mayor motivación que tenemos es la de encontrar “la mitad que nos falta”, nos ha mandado unas ordenes muy claras: “Todos tienen que estar DELGADOS Y FUERTES. Todos los que no sean así, los que no respeten este canon de belleza y no se esfuercen en encajar en él, serán considerados sexualmente no atractivos y por lo tanto no encontrarán su otra mitad para aparearse con ella”. A partir de ese momento, toda la humanidad, muerta de miedo, se esfuerza en hacer lo que se le ha mandado. Pero ¿qué quiere conseguir Atma, la voluntad Divina, con esto? Dos cosas:


Primero librarnos del miedo al hambre ..

Y luego que nos esforcemos en domar a ese animal llamado “cuerpo físico” y que comprendamos que nosotros somos los amos y él (el cuerpo físico) el siervo y no al revés. Atma quiere que pasemos hambre para que le perdamos el miedo. El miedo al hambre, que es el miedo a la muerte encubierto, es la base de esta sociedad de negatividades en la que vivimos en la actualidad. Vivimos en una sociedad que es el negativo de la positividad. En realidad es muy fácil saber cómo funciona el mundo positivo: exactamente al contrario que esta sociedad en la que vivimos. A la escala de valores que tenemos en este sistema negativo, solamente hay que darle la vuelta y obtendremos la escala de valores real, vista desde la positividad. Vivimos en un sistema esclavista, donde unos son los amos y poseen todas las riquezas del mundo, y los otros son esclavos y al no poseer nada tienen que obedecer a las órdenes de sus amos. Esto es así tanto a nivel global: los países grandes y ricos son los amos y los pequeños sus esclavos, como a nivel personal: si uno no tiene riquezas, medios de sustento, el que sí las tiene se aprovechará de él y este no tendrá más remedio que aceptarlo y humillarse ante su amo quien será el que le proporcione A SU VOLUNTAD Y ANTOJO medios para vivir. Y ¿cuál es el origen de este sistema? ¿Qué es lo que hace posible que este sistema esclavista en el que vivimos funcione?


EL MIEDO AL HAMBRE.

LA HUMANIDAD ESTARÁ LIBRE DE LA NEGATIVIDAD CUANDO LE PIERDA EL MIEDO AL HAMBRE.


Como ya dijimos: el miedo al hambre es el miedo a la muerte encubierto. La gente generalmente no es muy consciente de su miedo a la muerte hasta que esta toca a su puerta. Todo el mundo vive como si no se fuera a morir nunca. Decirle a la gente: “Hay que perder el miedo a la muerte”, no daría ningún resultado, ya que la mayoría de la gente no es consciente de que lleva ese miedo en su interior. La mayoría diría: “Va…yo no le tengo miedo a la muerte… cuando llegue, ha llegado”. Pero sin embargo todo el mundo es muy consciente de su miedo al hambre. Basta con que alguien no desayune una mañana para darse cuenta del miedo que le tiene a esa necesidad física. Por eso el Atma, la voluntad Divina, optó por este camino: usando nuestra debilidad sexual, nos impuso esos cánones de belleza para hacernos pasar hambre para PERDER EL MIEDO A LA MUERTE.


Todas las religiones del mundo animan a sus fieles a ayunar. Y eso es así porque el miedo al hambre (a la muerte) es el principal motivo por el que estamos estancados en la negatividad.




NADIE, NINGÚN JEFE, NINGÚN PRESIDENTE DE NINGÚN PAÍS PODEROSO, PODRÍA ESCLAVIZARNOS SI NO LE TEMIÉRAMOS AL HAMBRE (A LA MUERTE).


Si no le temiéramos al hambre, no aceptaríamos trabajar de sol a sol por unos miseros sueldos y el control o la esclavitud sería imposible. Si mi dignidad como ser humano para mí fuera más importante que el hambre del cuerpo físico, la esclavitud sería imposible. Si a mí no me importa morir de hambre, ¿cómo me iban a manipular los amos que se creen dueños del mundo?


LA HUMANIDAD TIENE QUE COMPRENDER QUE LA MUERTE FÍSICA ES MEJOR QUE LA ESCLAVITUD.


El cuerpo físico en comparación con los demás cuerpos que tiene el ser humano no tiene ninguna importancia. El cuerpo físico es de “usar y tirar” y tarde o temprano morirá. El tenerle miedo a algo que es irremediable es absurdo. Para comprender que la muerte es mejor que la esclavitud, es imprescindible perderle el miedo al hambre. Porque si el miedo al hambre me atrapa, me humillaré hasta los límites inimaginables para poder comer y el que tiene poder, el amo, se aprovechará de mí, tendrá poder sobre mi alma.


¡HAY QUE PERDER EL MIEDO AL HAMBRE!


Y el miedo al hambre se pierde pasando hambre, ayunando. El miedo al hambre se pierde también comprendiéndolo. El hambre física es la manifestación física del hambre espiritual. Nuestra hambre de “quiero comer” es la manifestación física del hambre de “quiero ser feliz” o “quiero vivir en la luz” o “quiero volver a mi origen” o como quiera que lo formulemos verbalmente. Cuando se nos niega la comida física, nos asustamos porque a nivel subconsciente pensamos que se nos está negando la entrada al Cielo. Por eso el comer se considera uno de los mayores placeres a nivel físico porque ese placer horizontal de estar lleno de comida se corresponde con el placer vertical de estar lleno de positividad, amor, felicidad, paz, alegría etc. De ahí que la gente cuando está deprimida, se dedique a comer. Al sentir un vacío vertical, lo intentan llenar de la única manera que saben: de manera física, en horizontal, comiendo.


El llamarle a alguien “gord@” se ha convertido en una de las peores ofensas. Ya no está permitido estar gord@. La gordura, la obesidad, es la acumulación de reservas de alimento por miedo a que algún día falten. Ya no se permite tener ese miedo. Hay que perder el miedo al hambre. Uno puede tener 200 kg si así le place. Lo que nadie puede tener es miedo al hambre. Lo de “hay que estar delgados porque eso es lo bonito y sexualmente atractivo” es un truco de Atma, de la voluntad Divina.


En realidad no se trata de estar delgados y ni muchísimo menos el estar delgado es bonito. Se trata de perderle miedo al hambre pasando hambre. Se trata de decirle al hambre: “¡Tú no vas a ser más que yo! ¡Tú no vas a poder someterme! Yo soy mucho más que tú, más que el cuerpo físico y por lo tanto lo que tú me estás haciendo sentir es insignificante en comparación con lo que yo soy capaz de sentir”. Y si por las noches el hambre no te deja dormir, le dirás: “Pues si no puedo dormir, no duermo, pero tú no me vas a poder someter. Yo soy más que tú. Yo soy más que el cuerpo físico”. Perdiendo el miedo al hambre, se pierde el miedo a la muerte. Perdiendo el miedo a la muerte se derrumbará para siempre el sistema esclavista en el que vivimos. Perdiendo el miedo al hambre y consecuentemente a la muerte salimos definitivamente del “cuadrado negativo” para no volver nunca más. Perdiendo el miedo al hambre y a la muerte nos haremos conscientes del resto de los cuerpos que tenemos, nos daremos cuenta de lo grandes que somos.


No se trata de estar guapos (sexualmente atractivos) y delgados, se trata de perder el miedo al hambre, a la muerte, y por eso no malgastemos más tiempo y energías en algo tan irreal como lo es “la comida sana”.


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